Brandon Algarbe (21) y Marcos Suárez (33) seguirán detenidos en el penal de Batán por disposición de la Justicia de Garantías. El crimen de Carlos Rodríguez ocurrió a fines de junio y es investigado por la fiscal María Florencia Salas.
La Justicia de Garantías dictó la prisión preventiva de los dos hermanos detenidos por el crimen del almacenero Carlos Rodríguez (61), ocurrido a fines de junio último.
El fallo fue dictado por la jueza Lucrecia Bustos, después de que así lo solicitara este martes María Florencia Salas, la fiscal que investiga el caso.
De esta forma, Brandon Algarbe (21) y Marcos Suárez (33) seguirán detenidos en en la Unidad Penal Nº 44 Batán, donde se alojan desde que la policía los atrapó el 30 de junio. El homicidio, en tanto, se había producido tres días antes en el negocio del barrio Las Heras.
En ese marco, la fiscal Salas solicitó permiso para que se realizaran cuatro allanamientos en un asentamiento de viviendas precarias cercanas al almacén de Fortunato de la Plaza al 8500 donde ocurrió el crimen. Precisamente, esa suerte de villa es donde testigos vieron que los asesinos habían escapado tras matar a Rodríguez y robarle una balanza, un parlante y otros elementos de valor.
De esta manera, el personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local detuvo a los imputados: al mayor lo aprehendieron a 50 metros del domicilio que tenían identificado, mientras que al menor lo arrestó este mismo lunes a la mañana el personal de la comisaría decimosexta por una tentativa de hurto en Fortunato de la Plaza y Polonia y lo tenía demorado en la dependencia policial.
En los allanamientos, la policía secuestró ropa similar a la que se ve en las filmaciones y a la que testigos describieron cuando mencionaron a los asesinos de Rodríguez. Cabe señalar que el arma de fuego utilizada en el crimen no fue encontrada durante el operativo.
También la policía halló un parlante, que los allegados de la víctima deberán reconocer, y un fernet y golosinas, elementos estos que habrían sido robados del almacén. Según trascendió, durante el fin de semana los detenidos ofrecían para la venta en los pasillos de la villa fernet y golosina.
Vale recordar que el almacenero había sido asesinado en la noche del jueves 27 de junio, cuando recibió un único disparo que le causó la muerte, de acuerdo al informe preliminar de autopsia al cadáver que entregó posteriormente el Cuerpo Médico Forense.
En dicho documento, Salas recibió además el dato de que se logró extraer un proyectil que podría asemejarse a un calibre 22, con lo cual se tiene una idea más precisa del arma empleada en el hecho.
Por otra parte, fuentes consultadas por LA CAPITAL agregaron que en la autopsia, además de la herida mortal del disparo, Rodríguez presentaba dos costillas fracturadas, lo que condice con la mecánica del hecho investigado, ya que testigos declararon que vieron a los delincuentes encima de la víctima, acción que le pudo provocar las lesiones.
En la operación de autopsia se determinó también que la bala ingresó por la zona abdominal y perforó un riñón, lo que generó una hemorragia masiva causante de una muerte en pocos minutos.
Rodríguez era una persona relativamente nueva en el barrio y que vivía en soledad en el mismo almacén de Fortunato De La Plaza al 8500, y se cree que fue sorprendido a poco de cerrar el comercio y retirarse a descansar en la parte trasera de ese domicilio.